miércoles, 20 de abril de 2011

Esclavos voluntarios.

Han cambiado las tornas; antes, el esclavo era obligado a serlo; por descendencia (nacías en una familia de esclavos y automáticamente eras ya esclavo), por pertenecer a un pueblo que ha perdido la guerra (los vencedores se repartían a los ciudadanos como si de mulas se tratase)...

La esclavitud fue un hecho histórico y, cmo tal, históricamente cambiante; no son el mismo "tipo de esclavo" (Si lo puedo llamar así sin ofender a nadie; ni a mí misma), un esclavo griego que uno romano, ni uno americano, más adelante. Pero todos eran esclavos. En algunas sociedades se podía, con mucho esfuerzo (y suerte) cambiar de "clase social", si en clases insertamos también la clase esclava. Ciertamente es una aberración contra la humanidad; ¿qué hace que una u otra persona sean inferiores a otra? ¿qué o quién te da el derecho de jugar con la vida de alguien? ¿hasta qué punto es legítimo decidir sobre una persona adulta como si fuese un animal? Nadie, absolutamente nadie está legitimado a ello, hoy en día (y menos mal...). Pero, sin embargo, hoy en día parece que algunas personas aspiran a ello; algunas personas aspiran a convertirse en más que alguien mientras que otras aspiran a depender tanto de alguien que hasta su propia vida quede alienada. Mientras las primeras miran por sí mismas, diciendo que todo ser humano es "egoísta" e intenta subir en la vida pisando a los demás, haciéndolos (metafóricamente) esclavos de su propio éxito, otras personas regalan su vida, como si realmente esto pudiese hacerse, como si estuvieran legitimados a hacerlo. Mucha gente me ha contestado; bueno, es que están legitimados a hacerlo, es que es su vida y, como tal, pueden hacer lo que les plazca con ella. Sí, es su vida; ¿dónde reside la dignidad humana? ¿en el hecho de poder decidir sobre la vida de uno mismo? pero, aún voy más allá; el hecho de regalar tu propia vida a alguien no es más que responsabilizar a esa otra persona de algo que, como acabamos de decir, es solamente tuyo, y debería formar parte de ti. Y esto me recuerda enormemente a Lévinas, mutatis mutandis, ya que Lévinas toma conciencia de que es responsable: de hecho es él mismo el que se hace responsable de los demás (que no de la vida de los demás), y no es una responsabilidad impuesta por el "esclavo".

Además, siguiendo con Lévinas; si somos responsables "del otro", si el rostro del otro te obliga a ser responsable de él, debes serlo de él, pero no pensando en la reciprocidad de la propia responsabilidad; si el otro ha de ser responsable de ti o no es cosa suya, tú no puedes obligar, imponer esta responsabilidad a nadie, más que a ti mismo.


Pensamos que la esclavitud está abolida, pero... ¿los que sí quieren ser esclavos?

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